La vuelta de las vacaciones es un buen momento para reorganizar nuestra casa. El botiquín es uno de los espacios que solemos tener más abandonados y al que prestamos poca atención. Con el tiempo vamos acumulando fármacos que a veces caducan o ya no recordamos ni para qué los tomamos en su momento. Por eso debemos deshacernos de ellos una vez revisados.
La ubicación del botiquín es importante, ya que debe colocarse en un espacio cerrado como una caja, apartado de la luz, de las temperaturas y humedad elevadas y en un espacio alejado del alcance de los niños.
Algunos de los medicamentos y materiales que deben incluirse en el botiquín doméstico son: alcohol, agua oxigenada, analgésicos y antitérmicos, antialérgicos, mucolíticos y expectorantes, algodón, gasas, vendas, vendas elásticas, esparadrapo, tiritas, tijeras de punta redonda, pinzas y termómetro.
Es interesante tener en un espacio visible los teléfonos de urgencias más cercanos a nuestra localidad, por ejemplo:
- Teléfono único de emergencias: 112
- Centro de Información Toxicológica BCN: 93 317 44 00
- Centro de Información Toxicológica Madrid: 91 562 04 20
Lo que debemos evitar tener en nuestro botiquín son: productos caducados, en mal estado, sin envase original, sin prospecto, sin fecha de caducidad, herramientas oxidadas, rotas o que no funcionen correctamente.
Un último consejo sería recordar que todos aquellos medicamentos caducados deben llevarse a la farmacia donde serán recogidos y tratados de forma correcta. Nunca debemos tirarlos a la basura directamente.