Errores al querer perder peso | Los 5 errores más comunes

Siempre relacionamos perder peso con hacer dieta, pero no tiene que ser así. Podemos perder peso de forma efectiva sin hacer dieta. Estamos tan acostumbrados a estos falsos mitos que no tenemos en cuenta otros factores muy importantes para ayudarnos a conseguir nuestras metas a corto y largo plazo.

Parecía fácil, pero resulta que conseguir el objetivo marcado se hace más cuesta arriba de lo que se pensaba.
Si se eliminan de la dieta todos los alimentos que se supone que engordan, ¿por qué la báscula no marca cifras más bajas? Los kilos siguen ahí y la frustración aparece con fuerza, para complicarlo todo aún más.

¿Qué es lo que puede fallar en un régimen de adelgazamiento?
Hay varios factores, pero hay que empezar por la clave: no lanzarse a la piscina sin asesoramiento. Es la primera advertencia de la profesional Sara Jiménez, dietista y nutricionista: “Es importante que nos pongamos en manos de un especialista, para que nos asesore de la mejor manera y siempre de una forma personalizada”.

Sigue leyendo , que te contamos los 5 errores más comunes cuando queremos perder peso

LOS 5 ERRORES MÁS COMUNES CUANDO SE QUIERE PERDER PESO

Dejar de comer ciertos alimentos pensando que engordan.
Una dieta tiene que ser variada, para no sufrir carencias nutricionales mientras se lleva a cabo. Frutas y verduras, legumbres, frutos secos, semillas y cereales integrales deben estar presentes sí o sí. Todo esto puede complementarse después con pescado, carne y lácteos.
Repetir demasiado.
Como explica Sara Jiménez, “es importante atender a la frecuencia de consumo de los alimentos. En muchas ocasiones, tendemos a repetir ciertos alimentos, cuando su frecuencia debería ser menor y también ocurre lo contrario”.
Empezar dietas imposibles de cumplir.
Llevar un régimen demasiado estricto puede desgastar enseguida y hacer que se acabe dejando. Aunque se alcance el peso deseado, el cansancio hará que se vuelva a las costumbres nutricionales de antes y, por lo tanto, al peso original.
El vacío en el estómago.
Si se lleva a cabo una dieta hipocalórica y se llega a pasar hambre, esto derivará en problemas de ansiedad. Y, de nuevo, en que se acabe abandonando el régimen y, después del esfuerzo, no se consiga el objetivo.
No realizar ejercicio.
Dejar de comer ciertas cosas hace bajar de peso, pero también se necesita practicar alguna actividad para que la dieta llegue a buen puerto. “La alimentación y el ejercicio son dos aspectos que funcionan juntos: si uno falla, los objetivos que nos propongamos no llegarán, o conseguirlos será mucho más costoso”, afirma Sara Jiménez.